“De pie, luchar El pueblo va a triunfar Será mejor La vida que vendrá
A conquistar Nuestra felicidad Y en un clamor Mil voces de combate se alzarán”
(Sergio Ortega)
Son los ecos de ayer que hoy vibran en nuestros corazones, ante el resultado alcanzado en esta histórica votación con la que culmina la segunda etapa para escribir nuestra Constitución. La primera fue el gran movimiento por el Apruebo, luego seguimos avanzando por el camino trazado desde el levantamiento popular de octubre de 2019 y las grandes movilizaciones que emergieron por todo el país, mostrando la irrenunciable decisión del pueblo para acabar con la Constitución fascista de Pinochet.
Este último fin de semana se consolidó el triunfo de las y los que luchan. Desde Anamuri saludamos y felicitamos a todas y todos los compañeros electos como constituyentes: a las mujeres que, logrando instalar la paridad de género, representan grandes anhelos de justicia e igualdad y que sin duda instalarán los principios feministas en la que debe estar basada la nueva Constitución; a las y los muchos independientes que dan fuerza y esperanzas en estos tiempos de crisis política que alcanza a la mayoría de los partidos; a nuestras hermanas y hermanos de los pueblos originarios, en particular a las lamngen que lograron una gran votación y entregaron espacios para dar desde su cosmovisión dual sentido a la paridad de género. Nos alegra y nos reconforta la diversidad y amplitud de quienes fueron elegidos, tanto jóvenes, como adultos, profesionales, del mundo de la cultura, pueblos originarios, diversidad sexual, dirigentes sociales, barriales, desde ya se demuestra la interculturalidad de este país.
Saludamos esta acción heroica realizada por todas y todos ustedes, dada la campaña atípica que nos impuso un contexto de pandemia, la acción represiva y el estado de inseguridad y angustia que se vive en estos momentos, producto de la incapacidad de un gobierno y un sistema incapaz de dar soluciones verdaderas a la grave situación de miseria y abandono en que hoy vive una importante parte de la población frente al COVID - 19.
Valoramos profundamente los esfuerzos y tenacidad de las y los candidatos independientes, que con ingenio y trabajo duro burlaron la falta de recursos, la exclusión de los espacios televisivos y otros medios de comunicación, las limitaciones a la movilidad para hacer campañas amplias, abiertas, de cara a la gente, y que de igual forma lograron llevar su mensaje a los barrios y poblaciones.
Agradecemos los esfuerzos de los pueblos originarios, que dieron una gran lucha por lograr el derecho a los escaños reservados, y gracias a eso hemos podido observar cómo han sido votadas las mujeres indígenas quienes claramente cuentan con el apoyo y confianza de sus respectivos pueblos, contribuyendo a consolidar una verdadera democracia tan necesaria para este país.
Anamuri un camino andado tras un ideal de cambio
Desde su nacimiento ANAMURI se planteó como una demanda de primer orden el acabar con la Constitución pinochetista y luchar por una Asamblea Constituyente. Junto a los movimientos sociales rechazamos el “Acuerdo por la Paz y Nueva Constitución” que en medio del levantamiento popular fraguó el gobierno de Piñera con parte de los partidos políticos, y mantuvimos en pie la demanda por una Asamblea Constituyente, luchando por una Constitución Paritaria y Plurinacional. Varias compañeras de Anamuri asumieron el reto de ser candidatas a constituyentes y a concejalas, enfrentando todas las dificultades de las candidaturas populares, llevando en su palabra nuestra propuesta campesina, la propuesta de las mujeres rurales e indígenas, señalando la gran tarea de cambiar este estado de cosas, porque los pueblos no resisten más, porque necesitamos una Constitución que resguarde los intereses y las riquezas de nuestras comunidades, los bienes que la naturaleza nos ha otorgado y tenemos el deber soberano de defenderlos del saqueo del capital, defender nuestra tierra, el agua, las semillas, nuestra cultura, la soberanía alimentaria para asegurar sistemas alimentarios nutritivos y saludables garantizando uno de los derechos principales para sustentar la vida, la salud de las personas, la biodiversidad y por el buen vivir del pueblo.
Que nos espera en esta gran tarea
Nos llenan de orgullo nuestras dos compañeras electas a la Convención Constitucional, “nuestras constituyentes” Alejandra Flores por el distrito 2 e Ivanna Olivares por el distrito 5. y el lugar que ocupo nuestra compañera directora nacional Millaray Painemal como candidata alterna del hermano Adolfo Millabur electo por los escaños reservados del pueblo Mapuche.
La labor de llevar adelante este proceso constituyente, sin duda, no será fácil. Aunque estamos ante la mayor derrota del gobierno, de la derecha empresarial y de las fuerzas políticas del centro, los siniestro tentáculos de capital se moverán, tratarán de cooptar a convencionalistas y aunque no tengan la fuerza para oponerse tratarán de entorpecer o sabotear el proceso, pondrán todos los obstáculos posibles, y nuestra gran tarea ahora es mantener todas nuestras fuerzas movilizadas.
El proceso nos mostró que aun cuando ellos dominan o son dueños de los principales medios de comunicación, a pesar de toda la presión y manipulación hacia nuestras conciencias, nuestro despertar es más poderoso. Ahora tenemos la tarea de no descansar, de lograr una elaboración colectiva de la Carta Magna y sobre todo de cara al pueblo y con el pueblo, rodearemos de mujeres rurales e indígenas a la Convención Constitucional.
Porque después de este fin de semana Chile es otro. El terremoto político que provoca la derrota de a la derecha y a los partidos de la Concertación, es un claro indicador que los cambios en la política que venían en curso se han acelerado vertiginosamente. La gran votación de los independientes y la votación de una fuerza de izquierda que incluye al Frente Amplio, al P.C. y otros sectores, va generando un nuevo escenario político, afianzado por el surgimiento de nuevos dirigentes y liderazgos jóvenes que van conquistando espacios políticos y asumiendo la conducción en los gobiernos locales, así como un rol preponderante en la Convención.
Ahora tenemos mucho trabajo que hacer para alimentar y construir las nuevas normas y principios de nuestro país. Normas y principios que garanticen los derechos del pueblo, que reconozcan a los pueblos originarios y sus derechos, que acaben con las desigualdades entre hombres y mujeres, que nos devuelvan la soberanía, que acaben con los privilegios de unos pocos, que protejan nuestros territorios y la Madre Naturaleza, que pongan la soberanía alimentaria en el centro de una nueva economía, que nos devuelvan el agua, el mar, la tierra y los territorios, que no discriminen contra quienes piensan o sienten distinto, ni a los migrantes que tras el engaño del éxito económico de Chile han llegado a nuestros país.
ANAMURI trabajará codo a codo con otras organizaciones sociales, participará activamente en la elaboración de las nuevas miradas, cooperará con todas y todos los constituyentes que defiendan los intereses de los pueblos que habitamos este territorio. Sabemos que la lucha aún sigue. Hoy celebramos con una profunda alegría, pero no nos detendremos y estaremos alertas más movilizadas que nunca, aportando lo mejor de nuestra organización, somos las mujeres que luchan rurales, indígenas y afrodescendientes, campesinas y asalariadas del agro, recolectoras del bosque y el mar, artesanas y poetas, somos Sembradoras de Esperanzas.
Este es un triunfo de todas las mujeres Rurales e Indígenas y afrodescendiente del campo y del mar de Anamuri, mujeres que luchan desde el norte al sur.
"Con fuerza y sabiduria ancestral las mujeres rurales e indigenas
ya estamos en la constituyente"
Anamuri
Asociación Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas de Chile
